– Alan, ¿Donde estoy? –
– En tu casa, en tu cama, tuviste un mal dia ayer. –
– ¿Ayer? querrás decir hoy… –
– Pues no señorita, ayer, porque ya es mañana. Te quedaste dormida en el auto despues que salimos de la disco, te traje a tu casa y te desperte en el estacionamiento. ¿No lo recuerdas? –
– Si, claro que lo recuerdo. ¿Pero qué? ¿Ya amaneció? –
– Yeah. Y no me digas que todavia tienes sueño porque dormiste como 17 horas… –
– ¿Qué hora es? –
– Son las dos de la tarde. Casi las tres. –
– Dios santo!! ¿Por qué no me despertaste antes? –
– Supongo que es porque yo tambien me acabo de despertar por ierto, tu sofa es muy cómodo… Además, aparte de ser tu chofer tambien tuve que limpiar la sala… –
– ¿Y eso por qué? La sala estaba limpia… –
– Pero tuve un pequeño accidente con la sopa que te había preaparado. En este momento tu alfombra debe estar llegando al cielo de las alfombras… –
– Ay Dios!! Mi mamá me va a matar… Bueno, no importa… Me siento mal. La cabeza me va a estallar… –
– Y no es para menos, con todo lo que tomaste ayer… –
– No me lo recuerdes, por favor. –
– Por cierto, me debes una explicación. ¿Qué te ocurrió? Tu no eres asi. Te comportaste como una niña miedosa. –
– Mejor ahorrame el mal rato y hablemos de otra cosa. ¿Se puede? –
– Es increible que no puedas contarme a mí!! A tu mejor amigo!! –
– Disculpa, pero es que yo tampoco lo podría explicar muy bien. –
– ¿Cómo es eso? –
– Es que a veces siento que ya no soy la misma, que me convertí en alguien más… O peor aún, que ya no soy nadie, es extraño. –
– Me imagino… ¿Pero, a qué se debe eso? –
– Ultimamente me han ocurrido cosas difíciles de describir… Es como si la Veronica que todos conocen se hubiese ido de vacaciones a Aruba y… –
– Y hubiese dejado a una muchacha extraña haciendose pasar por ella. –
– Exacto!! ¿Como lo supiste? –
– Pues, me ha pasado también… –
– Ahh. entiendo. Es desgradable, ¿verdad? –
– Si. Bastante… Pero, eso no ocurre de la nada… Algo tuvo que haberte pasado para que cambiaras así. –
– Es que ni siquiera sé si realmente he CAMBIADO, ó sólo estoy exagerando. –
– Yo creo que si has CAMBIADO, pero tranquila. Esas cosas pasan. –
– Ojalá. Porque todo este asunto es muy incómodo. –
– Me imagino… ¿Sabes algo? Ayer esperaba mucho más de ti. No te ofendas, pero parecias una tonta… La verdadera Veronica habría conquistado a ese tipo con los ojos cerrados… –
– ¿Ves? El asunto es preocupante… –
– Y, ¿Con cuantos más te ha ocurrido lo mismo? –
– Pues, con ningun otro. Eso es lo más extraño. –
– Vero, ¿Te gusta mucho el tipo? Creo que ya sabes a lo que me refiero… –
– ¿Qué? Estás loco!! Eso no es lo que me pasa… –
– Disculpa, yo sé que tu no crees en el amor, y mucho menos te enamorarías. O mejor dicho, la verdadera Veronica no lo haría, pero recuerda que ella está en aruba, así que, como eres otra, es posible… –
– Fijate que no. No es posible. Y me estás asustando… –
– ¿Por qué? –
– Porque necesito volver a ser yo misma, pero rápido!! –
– Extraño a la Vero de siempre… A la que todo el tiempo sonreía y estaba lista para una fiesta. La que se iba por horas al club sólo a perder el tiempo hablando pistoladas conmigo, la que se preocupaba más por su peso que por la paz mundial… La que no le temía a nada, mucho menos a un hombre. Y lo más importante, era segura de sí misma. –
– Yo también, Alan… Yo tambien. –
– Esto se acabará, Tranquila… –
¿Que es lo que realmente me pasa? Esto no es normal… Pero, no todo es malo, al menos me le escapé a Diego otra vez… Ay no!! Ya habló la nueva Veronica… Este cambio se tiene que terminar. Es urgente, la Vero de antes debe regresar… ¿Pero cómo?
Read Full Post »